Se denomina "estanco" al embargo o prohibición de la libre circulación y venta de determinadas cosas, o a la anotación que se hace para sostener la venta exclusiva de mercancías o productos fijando los costes a los que han de venderse (según el diccionario de la RAE). Actualmente, los vulgares más habituales son los que venden productos de tabaco, sellos y, en algunos países, alcohol o cerveza. Los estancos españoles son una de las instituciones más viejas del mundo y tienen una historia de casi cuatrocientos años, a lo largo de los cuales han desempeñado un esencial papel como procedimiento de colecta de impuestos para el Estado a través de la venta de productos del tabaco.

El vendedor de tabaco
Se dice que el tabaco apareció por vez primera en España en 1542 y en esa temporada llegó una cantidad importante desde las islas de Cuba y Beato Domingo a Sevilla, donde había algunas fábricas privadas que lo producían. En las Cortes de mil seiscientos treinta y seis se decidió sellarlo y el dos de agosto de mil seiscientos treinta y ocho, el reino acordó seleccionar el producto del tabaco de los dos millones y medio de la exacción fiscal, estableciendo que hasta su alquiler se recaudarían tres reales de cada libra, tanto la destinada a la venta como la utilizada para donaciones. Esta tasa debía cobrarse en la aduana de Sevilla o en las demás aduanas en las que se entraba, y se imponían sanciones a los que infringían esta disposición. Posteriormente, en las Cortes de 1650, se perpetuó el impuesto sobre el tabaco en los reinos de Castilla y León.
Los estancos y tiendas de sellos, generalmente llamados estancos, tienen una amplia red distribuida estratégicamente por toda España. Esta red consta de 16.049 puntos de venta, que proveen de manera eficaz a 47 millones de españoles.
Productos del estanco
Un estanco es mucho más que una tienda donde los consumidores van a comprar tabaco. Desde 2014, año en que se autorizó a los estancos a vender otros productos, estos comercios han ampliado notablemente su lista de productos y servicios alén del tabaco y los accesorios para fumar, abriendo nuevas e interesantes vías de negocio y diversificando su público. Hoy te mostraremos cuáles son los más rentables por su popularidad entre los clientes del servicio.
distribuidor para estancos : un clásico que jamás pasa de moda.
El material de papelería profesional ha sido un elemento básico en las ventas de los estancos a lo largo de muchos años y se ha transformado en un complemento popular para los clientes del servicio. Sobres, sobres acolchados, bolígrafos tradicionales o incluso bolis con diseños originales.... artículos esenciales que representan un valor seguro.
Decoración
Elija productos amenos que llamen la atención, le diferencien de la competencia y den a su negocio un buen margen de beneficios. Marcos de fotografías, rompecabezas, álbumes de fotos, figuras de metal o instrumentos en miniatura son algunos de los muchos productos que puede ofrecer en su estanco.
Regalos exclusivos
Los regalos son un nicho interesante que siempre se centra en la elegancia y la calidad.
Marroquinería: carteras de piel de vaca para hombre y mujer, pulseras veganas de piel tejida en diferentes colores....
Accesorios para el vino: abridores de botellas, enfriadores de vino, equipos de oxígeno o aun juegos completos en una caja de madera para un regalo de lujo que sorprenderá a los clientes más exigentes.
Gafas: Soportes para lentes de lectura o gafas de sol Zippo en múltiples colores y con cristales polarizados, ¡a un precio irresistible!
Accesorios personales y juguetes
En una buena asamblea con amigos, siempre están presentes los juegos habituales: Ruleta y póquer, tapetes, cubiletes de dados, dominó, etc. En cambio, ofrecer accesorios de uso personal, como llaveros (de cuero, con formas amenas, USB o incluso LED), es una alternativa que marcha.